Gatos y jaguares
¿Te has preguntado alguna vez cómo un animal tan independiente como un felino vive contigo?
El antepasado salvaje del gato habría sido un pequeño felino de hábitos solitarios y muy territorial que estaría adaptado a un clima semiárido y a cazar en extensas áreas de terreno. La domesticación del gato podría haberse desarrollado hace unos 9500 años en el delta del Nilo y Mesopotamia. Esa época coincide con el paso de los seres humanos de cazadores a recolectores, es decir, los humanos se convirtieron en ganaderos y agricultores y empezaron a abastecerse de grano con la consiguiente aparición de los roedores.
Los felinos salvajes más tolerantes encontraron un nuevo lugar en el que cazar cerca de los humanos que les dieron protección y presas. Con el paso del tiempo, estos gatos se reprodujeron y dieron lugar a los gatos domésticos en todo el mundo. De todos modos, insisto, si compartes tu vida con un gato sabes perfectamente que eres tú el que vives con ellos y no al revés.
No te confundas, tú te has adaptado a vivir con él y si tienes gato entiendes lo que acabo de decir.
Déjame que te guíe en un corto viaje a través de su sistema gastrointestinal que demostrará sin lugar a dudas que los gatos son carnívoros obligados como su familiar felino el jaguar. Las diferencias con el humano aparecen una y otra vez.
Tu amigo tiene 30 piezas dentales muy afiladas que están perfectamente adaptadas a perforar, cortar y desgarrar, más que para masticar o triturar. Curiosamente, su mandíbula no se mueve lateralmente confirmando que su boca no está diseñada para triturar. Además, carecen de amilasa salival que es una proteína enzimática cuya función es predigerir los hidratos de carbono presentes en la comida como el almidón de los cereales.
Otra característica típica de carnívoro estricto, es la longitud y la estructura de sus intestinos. Éstos están adaptados para digerir proteínas y grasas, pero no para digerir carbohidratos como el almidón de los cereales: son cortos y presentan pocas modificaciones; podemos decir que constituyen una continuación tubular relativamente simple del canal alimentario desde su inicio en el píloro hasta su fin en el ano.
Los intestinos largos son típicos de los animales que se alimentan con dietas que incluyen verduras y frutas, porque se tarda tiempo en digerir este tipo de alimentos. Ten en cuenta que los gatos no son capaces de regular a la baja la producción de las proteínas enzimáticas que se encargan de digerir las proteínas, por lo que necesitan sí o sí una dieta rica en proteínas

¿Estás dispuesto a hacer un cambio en la dieta de tu amigo de cuatro patas y no sabes cómo?
Llegados a este punto si te preguntas qué debería comer tu gato, la respuesta es evidente: necesita comer carne para sobrevivir. No pueden percibir el sabor dulce porque la evolución es sabia y los carnívoros obligados no necesitan detectar el sabor dulce para sobrevivir. No puedes alimentarlo de la misma manera que alimentarias a un perro y mucho menos de la misma manera de la que se alimenta un humano. Tienes que aceptar que vives con un depredador, aunque ronronee.
¿De verdad crees que un alimento ultraprocesado rico en cereales, legumbres y verduras es adecuado para tu gato? ¿Crees que los jaguares deambulan por los campos de cereales para comer? ¿Te imaginas a un jaguar comiendo lentejas?
Escríbeme, estoy aquí para ayudarte. Alkimeal te lo pone fácil, aunque los cambios nunca son fáciles. Es fundamental que te armes de paciencia porque ya sabemos que los gatos son especiales y algunos puede que sean reticentes al cambio de alimentación, pero no desesperes. Recuerda que he estado en la misma situación de cambio en la que tú estás ahora, de hecho, mis gatos Salem y Hera me dieron una lección de paciencia.